Hemos dejado atrás las hermosas tierras del País Vasco poco
después de pasar por Bilbao y rodamos por Cantabria. Casualmente con ello
quedaron atrás las fuertes lluvias abriéndose paso un tímido sol que poco a
poco iría ganando fuerza y que pregonaría algunos días soleados o parcialmente
nublados acordes con la foto del satélite que muestra como el temporal se
desplaza ligeramente hacia el sur bañando prácticamente el resto de la
península, perfecto para mi y para quienes están recorriendo como yo el camino
del Norte en estos días.
Pero cuidado no os confundáis, con la marcha de la lluvia el
camino no se ha hecho del todo fácil. Si bien hemos recorrido hasta Castro los
primeros 200 km del camino del Norte con creces, aún nos quedan cerca de 600km.
Por lo pronto me basta con disfrutar del mágico encuentro con Castro gracias a
ese toque románico y medieval que le dan sus mas antiguas construcciones entre
las que destacaría el faro del castillo Santa Ana y su ermita, la iglesia
románica de San Pedro del S. XI y el San Guillén donde se reparan los barcos.
Podría ahondar en detalles pero nos queda una larga jornada hoy por delante de
mas de 100 km, el terreno relativamente llano, al final de la jornada marcaría
cerca de 2000 m de desnivel acumulado.
Aunque me voy de Castro sabiendo que podría dedicarle mas
tiempo, soy consciente que esa sensación me acompañaría gran parte del tiempo
pero que además es contradictoria con la necesidad que tengo de avanzar. Así
que a tomar la N634 nuevamente hacia el Pontarrón de Guriezo, Mollaneda y
Laredo sin que el paisaje pierda en ningún momento su encanto, aunque nos
alejemos por momentos del mar, prácticamente siempre que alcemos la cabeza le
veremos o nos encontraremos algún bonito pueblo. He aprovechado para desayunar
en Laredo pero tengo que confesaros que ya lo había hecho antes de salir es mas
bien mi almuerzo, pero tengo la disculpa de venir quemando calorías a capela.
Deberemos ir por el paseo marítimo de la playa de Laredo
hasta Riaño para tomar la barca que nos cruza la Ria hasta Santoña. También es
posible continuar desde Laredo por la N634 tomando la CA241 hacia Santoña con
algunos km mas, dado que la barca tarda algún tiempo en pasar a recoger pasajeros.
Yo he tenido que esperar casi una hora en la playa, aunque he conocido a una
peregrina que venía de las islas Baleares y que estaba en la misma situación
mía mientras esperábamos la barca y ha valido la pena. Lo cierto es que no me
encontraba en el camino a ningún peregrino hacía mucho tiempo y es un encuentro
muy especial.
La ruta continua por el canal de Boo hacia Argoños y
Cercedas y como veréis será habitual durante toda la jornada en especial el
paisaje. Desde allí por la carretera autonómica SP4141 cruzando San Pantaleón y
tomando mas adelante la SV4117 por Bareyo y Guemes. Tomare nuevamente la 4116
hacia Galizano y continuaremos ligeramente alejados de la playa hasta Somo. Me
he detenido a comer el bocadillo en la punta del Rostro en Pedreña para
disfrutar de la vista de Santander al otro lado del Puerto, con unas vistas
marítimas preciosas y un crucero aparcado en el muelle. Un pueblo seguido de
otro hasta llegar a el Astillero donde tendría que lidiar con algo de cuesta.
Unos 24 km con un sube y baja positivo para ganar 200 m de desnivel atravesando
las localidades de Villanueva, Obregón y Morriones. Esta ultima donde tomaremos
nuevamente la N634.
Un ligero receso con las cuestas mientras seguimos cruzando
pueblos como Pomaluengo, Castañeda y Vargas, tan alejados de la costa como para
no verle. Descendemos hasta Torrelavega para perder en 5 km los 200m de
desnivel que habíamos ganado y por la autonómica C6316 hasta Santillana del Mar
otra vez subiendo para culminar la jornada de hoy con unos 112 km en este
peculiar y particular lugar.