Una vez mas el Cañón del río Tajo sacia las ansias de
montaña de cerca de 4.000 bikers provenientes de todos los rincones de la
geografía española, poniendo a prueba nuestra resistencia, nuestro equipamiento
y nuestra capacidad de trabajo en equipo para cumplir con cualquiera de los dos
trazados propuestos por la organización, serían necesarias todas nuestras
habilidades sobre nuestras bikes para completar tanto los 80 como 125 km.
Hemos salido a las 10.00 hrs como estaba previsto desde
Talavera de la Reina bordeando el río Tajo cruzando maizales y otros cultivos
hasta la localidad de Calera y Chozas, ganaremos un poco mas de altitud con las
comodidades de la pista si el atasco de bikers nos permite mantener un pedaleo
constante hasta nuestro primer avituallamiento en Aldeanueva de
Barbarroya. Todo un lujo de camino
adornado en todo momento por el cañón del Tajo y el embalse de Azután, pero que
pronto dejaríamos de lado para probar una vez mas el Talajara mas implacable. La primera trialerilla rompería no solo
con nuestro constante avance sobre la pista sino que también despertaría las
fuerzas de los mas acostumbrados a subir trialeras pero con el obstáculo
añadido de cientos de bikers subiendo por ella, además de la dificultad del
terreno. Muchos pinchazos, roturas de cadenas y caídas a nuestro paso nos
recuerda que el terreno no es nada amigable sino todo lo contrario, a través de
un baja y sube entre Belvís y Alcaudete de la Jara la montaña nos muestra el
diente. La Parrañera, el Barrancón, el Burro y Baldecelada nos tratan como
fieras pues tendremos que sortear sus subidas y descensos con toda nuestra
atención, aunque Alcaudete nos trate como reyes con sus famosas migas,
Powerade, sangría y algo mas en nuestro segundo punto de avituallamiento.
Y falta que hace, justo después de salir del pueblo
vienen 5 km espeluznantes que nos
mantendrán ocupados ganando altitud durante al menos 45 minutos con 30ºC a
cuestas. Muchas caras largas subiendo se niegan a dejar una sonrisa a nuestra
cámara, la subida es inacabable, se
hace eterna cualquier arbusto es valido en mitad del repecho para descansar o
reparar cualquier cosa de nuestras bicis. Pero como somos bikers sabemos que
este es el plato fuerte y no damos el brazo a torcer, continuamos hasta hacer
cumbre en los olivos donde descolgamos por el descenso del Zurdo, con una última y rápida parada de
avituallamiento en el Membrillo. Nos quedarían un par de repechos rompepiernas
por el desgaste que traemos a esta altura del circuito , el de la Culebra y el
de el Barranco de las Olivas desde donde se ve todo el valle del Tajo. Hemos
sido precavidos por sugerencia de la organización, se gana mucha velocidad en
este ultimo descenso y es muy divertido, las canteras adornan las vistas y los
cultivos de este lado de la Jara, lo cual es bueno porque nos ayuda a
mantenernos con su encanto, ya que luego de la diversión del descenso tendremos
que pedalear cerca de 10 km para llegar de nuevo a nuestro punto de partida.
Para finalizar deciros que esta dura prueba realizada implica
todo el merito tanto para quienes se atreven con este anfractuoso recorrido
como para quienes la organizan, la
Talajara puede ser dulce y tierna o puede ser implacable, depende de cómo se
mire.
Un saludo y un abrazo fuerte a mis amigos de Fortubike, MTB Leganes, mis vecinos Bikers de la U Carlos III en Leganes, El club de Amigos del Mountain Bike, a todas las peñas que participaron y a todos los bikers que han hecho posible esta sana convivencia, a la organización y a todos los amantes de la montaña y el Mountain Bike, hasta la próxima!